No es sencillo hablar de sobrepeso y obesidad. Además de las complejidades psicológicas que entraña la construcción de una imagen propia, se trata de un tema importante de salud pública. Según datos de la OMS, por lo menos 2.8 millones de personas mueren como consecuencia de complicaciones de salud relacionadas con la obesidad y el sobrepeso. En México, el porcentaje de adultos de 20 años o más con obesidad y sobrepeso a nivel nacional era de 75% según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición en 2018. Esa realidad, ahora se ve magnificada por la presencia de la covid-19 y el impacto que este virus ha tenido en poblaciones con co-morbilidades, entre ellas la hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares, además de la obesidad misma . En nuestra encuesta sobre obesidad en México hace algunos años, sin embargo, el panorama parece bastante distinto ya que las personas no se perciben a sí mismas como personas con exceso de peso. No obstante que el 40% de las personas consultadas dijeron saber cuál era el porcentaje de obesidad en México, 72% de ellas dijeron que no se consideraban como personas con sobrepeso.
Los hábitos saludables son uno de los modos cruciales para frenar la obesidad. Y, si bien no es garantía, preparar la comida en el hogar puede incrementar las posibilidades de que el menú sea más sano. Una vez más, en una respuesta reveladora, una abrumadora mayoría contestó que la comida que ingiere se prepara en casa.
Además de una mejora en las costumbres alimenticias, otro de los modos reconocidos de hacerle frente a este problema de salud es la activación física. Cuando le preguntamos a las personas sobre su familiaridad con el ejercicio, las respuestas fueron muy esclarecedoras. El 40% de las personas respondieron que sí hacían ejercicio. Y al hacer la consulta más detallada sobre el ejercicio, el periodo de tiempo más común de ejercicio por semana fue la costumbre de ejercitarse una vez por semana. No es de extrañar, ante tal frecuencia, que la obesidad tenga la prevalencia que tiene entre la población mexicana.
Según la Encuesta de salud y nutrición antes mencionada, entre 2012 y 2018, el sobrepeso entre adultos creció 4%. Las estrategias para aminorar esta problemática no han sido efectivas. Así lo pone en evidencia nuestra encuesta y los datos posteriores sobre el alza en obesidad entre adultos mexicanos. La atención que la actual epidemia ha dispensado a este problema urgente de salud pública debería continuar aún cuando se supere a la covid-19. El problema es tan complejo y tiene tantas ramificaciones que bien lo amerita.
